Son los besos que me has dado, los que se han perdido entre mis dedos, volando, viajeros, en algún sueño, en alguna luna, en una mañana de ligera realidad, soleada, radiante, bañada de una canción que vate sus alas lejana, distante…
Y es ahora, que te contemplo, como el autor con su obra, que al mirarla, al sentirla de nuevo, no es autor, es público, es obra, pues al contemplarla la termina… Y mi vida cambiará cuando mis nuevos deseos vuelen.
Hacía tiempo que no me psaba por aquí.. ¡Es preciosooo!