[…] Florencia, sólo explicada por la música1, refinada majestuosidad, impetuosamente provocativa como el vuelo de un Fénix que reluce y encandila como el sol. Una amante celosa que ata a volver a ella con su mero recuerdo.
1 Tchaikovsky, Souvenir de Florence op. 70, 1. Allegro con spirito