Quizá algún día volvamos a encontrarnos de nuevo… te vea en la calle, me mires a los ojos y apartes la mirada, vista al suelo y, al pasar por tu lado, se te escape una sonrisa… y… sigamos cada uno nuestro camino… quisieras girarte y mirarme como me alejo… quisieras… porque yo siempre he querido… yo si me he girado y he visto como te alejabas… como te llevabas tu sonrisa… quizá también la mía.
Todavía te recuerdo… no me da vergüenza reconocerlo… por lo menos ahora no me da vergüenza reconocerlo, será porque fuiste lo mejor que nunca he tenido, será porque todavía me consuelo pensando en lo que tuvimos y ya no tenemos.
Mi camino está muy lejos del tuyo… siempre tuvimos vidas muy distintas, pensamientos muy distintos… éramos muy distintos… éramos. Nunca me plantee un somos, un nosotros… solo pensé en que fueras mía, y tú siempre quisiste que fuera yo…
Siempre has sido de esas mujeres que te iluminan cuando todo está gris y oscuro, de las que en días de lluvia te abrazan y te guardan con su paraguas cuando das un paseo, de las que en los días de frío te ajustan la bufanda para darte un beso y de las que en las noche de soledad llenan la cama…
Me arrepiento de que ahora solo seas una figura esculpida en el viento… ahora sólo me queda silencio… silencio y recuerdos.