Pasó una hora. Dos. Y hasta tres. La lengua de la noche entra por mi ventana. Gélida y húmeda me saca una sonrisa. De color gris perla, tenue, tímida. Después de tanto tiempo nos hemos visto de nuevo. Amor, amor, amor. Amor querido. Después de tanto tiempo que no nos hemos visto y yo me he acordado de ti. Mucho tiempo, he estado pensando en ti. Amor, amor, amor perdido. Amor perdido, sé que nunca olvidaré lo que te he querido, que nunca olvidaré lo que nos hemos querido después de tanto tiempo, si quieres acordarte de mí. Pasó una hora. La lengua de la noche entra por mi ventana. Amor querido.